Los girasoles son flores de tallo robusto y fuerte que pueden alcanzar hasta 3m de altura. Además del girasol amarillo, también existen versiones naranjas, rojo oscuro, color crema, y marrones. En cuanto a la forma, podéis encontrar girasoles con flores grandes y pequeñas, y con una sola fila de pétalos, o con varias. Elijas la forma que elijas, el girasol garantiza una dosis de luz y sol veraniegos.
Corta 2-3 cm de cada tallo en diagonal con unas tijeras o navaja afilada y quita las hojas sobrantes del tallo para evitar que estén en contacto con el agua del jarrón. Coloca los girasoles en un jarrón, preferiblemente de cristal, y rellénalo de agua del grifo a temperatura ambiente.
Añade un sobre de nutriente para flores. – Rellena regularmente el jarrón con agua nueva, pues los girasoles necesitan bastante agua y coloca el jarrón con los girasoles en un lugar luminoso, evitando la luz solar y alejado de fruteros y puntos de calor o frío, como radiadores o aire acondicionado.
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